- CONELECTRICAS R.L reporta que junio y setiembre fueron los dos meses con mayor caída de rayos en el 2021.
- Expertos hacen llamado a la población de evitar plazas de fútbol, potreros o zonas amplias y descampadas durante estas épocas en que se presenta este tipo de actividad.
Junio, 2022. Los expertos del Consorcio Nacional de Empresas de Electrificación de Costa Rica (CONELECTRICAS R.L) aseguran que, en época de rayería, los electrodomésticos que corren más el riesgo a sufrir un daño son aquellos que poseen una mayor cantidad de componentes electrónicos; entiéndase pantallas, computadoras, microondas, modem de internet, consolas de videojuegos y equipos de sonido.
Datos del Centro de Despacho Conjunto de CONELECTRICAS R.L indican que durante el año anterior se registró la caída de 341. 378 descargas atmosféricas o rayos en todo el país, siendo junio y setiembre los meses de mayor cantidad con 99. 287 y 143.823 respectivamente.
“Cuando cae un rayo, las líneas de distribución de energía funcionan como grandes antenas y están expuestas a las cargas atmosféricas. En el momento del impacto se genera una perturbación en el voltaje que llega a los tomacorrientes de nuestras casas, por lo que los electrodomésticos sufren esa energía adicional que los dañan, si no están bien protegidos, o no hay una buena instalación eléctrica”, explica Melvin Pacheco, subgerente e ingeniero eléctrico de CONELECTRICAS R.L.
En este sentido, el experto recomienda desconectar los electrodomésticos durante las lluvias con tormenta eléctrica. En el caso de pantallas o computadoras que estén conectadas a la electricidad o al internet, se deben desenchufar de ambos servicios.
Aunque no es común que los bombillos se quemen, si lo hacen es probable que sea por una falla en el sistema eléctrico de su casa o empresa, la cual durante una descarga atmosférica no es capaz de drenar a tierra rápidamente la energía sobrante producto del “rayo”.
“En los últimos años, los bombillos contienen una mayor cantidad de componentes electrónicos para aumentar el ahorro energético, por ejemplo la iluminación LED, condición que los hace más sensibles a estas perturbaciones. Sería muy difícil que se dañen los bombillos, si el sistema eléctrico de la casa está trabajando en una forma adecuada, incluyendo la varilla de puesta a tierra y la caja de breakers”, añade el ingeniero eléctrico.
No sirva de antena
Sobre la seguridad de la población, el Consorcio hace un llamado para que en época de rayería se evite la visita y estadía en lugares como plazas de fútbol o potreros.
“Supongamos que estamos en una plaza de fútbol, donde el terreno es plano y no tenemos árboles alrededor. En ese momento nos convertimos en “antena” de atracción de la descarga, por lo que aumenta la posibilidad que el rayo nos impacte directamente. Si existiera un árbol cerca, sería el que se convertiría en esa antena y las posibilidades que afecte a una persona se reducen. Pero tampoco es conveniente protegerse justo debajo del mismo porque podemos sufrir una descarga indirecta”, amplía Pacheco.
Si una rayería lo toma por sorpresa en un sitio abierto como un potrero, lo primero que debe hacer es alejarse de los objetos metálicos, tales como cercas, corrales e incluso verjas.
“En el campo principalmente hay cercas de púas o eléctricas que tienen la posibilidad de conducir electricidad proveniente del rayo a grandes distancias, y aunque se esté protegido en algún sitio y no exista riesgo de impacto directo, si están cerca de estos conductores, se corre el riesgo de una descarga eléctrica”, enfatiza el ingeniero de CONELECTRICAS R.L.
Si el fenómeno es muy fuerte colóquese en posición fetal para que no sirva de antena, además nunca se proteja debajo de un árbol porque podría sufrir una descarga eléctrica indirecta.
Acerca de CONELECTRICAS R.L.
CONELECTRICAS R.L es el Consorcio integrado por COOPESANTOS R.L, COOPEGUANACASTE R.L, COOPEALFARORUIZ R.L y COOPELESCA R.L”. Juntas abastecen del servicio eléctrico a aproximadamente 138.325 viviendas de las zonas más rurales del país. Esto representa 11,32% de los hogares costarricenses, es decir, atienden la demanda el 20% del territorio nacional, para una cobertura de 10.693 km².
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